Acerca de Rolex - Sostenibilidad - Principales logros en 2025

La certificación de sostenibilidad más alta para la futura sede en Bulle

Rolex abrirá una nueva sede en Bulle en 2029. Al acceder a una nueva reserva de mano de obra en la región de Friburgo, podremos impulsar aún más nuestro desarrollo y seguir garantizando el nivel de calidad por el que la marca es reconocida. Este proyecto tiene como objetivo llegar a la categoría más alta de la certificación en el marco establecido por BREEAM (Building Research Establishment + Environmental Assessment Method).

BREEAM es un referente mundial en la evaluación del impacto medioambiental de los edificios: ya ha certificado más de 600 000 en más de 89 países. Evalúa el rendimiento de un edificio a través de cinco niveles de clasificación, desde «correcto» hasta «excepcional», que es el nivel al que aspiramos para nuestra futura sede en Bulle.

Nos hemos comprometido voluntariamente a obtener esta prestigiosa certificación para nuestra quinta sede, con el objetivo de convertirla en el primer edificio industrial de esta escala en recibir tal distinción en Suiza.

Futura Sede de Rolex en Bulle — Esta imagen es una ilustración en 3D.

Diseñando y construyendo según los más altos estándares

Para lograr la clasificación «excepcional» de BREEAM, hemos puesto en marcha un conjunto de medidas ejemplares que afectan tanto al diseño como a la ejecución del proyecto. Por ello, estos compromisos técnicos y organizativos requieren una gestión especialmente optimizada de la energía, el agua y los recursos materiales.

Prototipo del Edificio Rolex Bulle — Esta imagen es una ilustración en 3D.

«Para lograr la clasificación “excepcional” de BREEAM, hemos puesto en marcha un conjunto de iniciativas ejemplares que afectan tanto al diseño como a la ejecución del proyecto».

La salud y el bienestar en el corazón del proyecto

Esta nueva sede representará plenamente el enfoque de Rolex con respecto a poner la salud y el bienestar de todos sus empleados a la vanguardia de sus operaciones:

• Además de estar rodeado de materiales duraderos y estéticamente agradables, los futuros empleados podrán disfrutar de amplias vistas del exterior y de una abundante exposición a la luz natural.

• Todos los materiales y productos utilizados cumplirán los requisitos más estrictos en lo que respecta a las emisiones de compuestos orgánicos volátiles (VOC, por sus siglas en inglés), formaldehído (que afecta al aire en el interior) y otras sustancias peligrosas.

• Por último, a pesar de una reducción sustancial de los requisitos de energía en comparación con las construcciones tradicionales, los empleados de la futura sede de Bulle podrán seguir disfrutando de un entorno con condiciones térmicas y acústicas óptimas.

Fechas clave:

• 2023: lanzamiento del proyecto y la decisión del equipo ejecutivo de Rolex de aspirar a la clasificación «excepcional» de BREEAM para la futura sede de Bulle.

• 2024: adquisición del permiso de planificación.

• 2025: inicio de la construcción.

• 2029: fecha de mudanza a la sede de Bulle.

Nuevo sitio en Bulle — Esta imagen es una ilustración en 3D.

«Esta nueva sede representará plenamente el enfoque de Rolex con respecto a poner la salud y el bienestar de todos sus empleados a la vanguardia de sus operaciones».

Limitar el impacto medioambiental de los edificios preexistentes

Nuestras tres sedes de Ginebra han sido certificadas como «En uso» por BREEAM desde 2024. Esta certificación, destinada a edificios ya en funcionamiento, se otorga con base en 170 criterios que abarcan nueve áreas, incluyendo la salud y el bienestar en el lugar de trabajo, la gestión del agua y el mantenimiento de espacios verdes. La sede de Bienne recibió la certificación «En uso» de BREEAM en 2025. Estas distinciones reflejan los esfuerzos continuos realizados para limitar los impactos relacionados con el uso general de nuestros edificios.

Limitar los impactos medioambientales — Esta imagen es una ilustración en 3D.

Sostenibilidad

Bases sólidas para la estrategia del agua y la biodiversidad

La gestión del agua y la protección de la biodiversidad están a la vanguardia de nuestras prioridades, como nuestra estrategia de sostenibilidad. Esta estrategia, ambiciosa y claramente definida, forma parte de un contexto global más amplio del aumento de los riesgos relacionados con el agua y la degradación de la biodiversidad y los recursos naturales.

Un mapa de impacto inicial

Para definir un plan de acción coherente, empezamos por planificar los impactos y riesgos en el agua y la biodiversidad como resultado directo de nuestras operaciones, pero también a lo largo de nuestra cadena de suministro.

Después, buscamos comprender las repercusiones a las que se enfrenta la naturaleza a lo largo de toda nuestra cadena de valor, siguiendo los pasos recomendados por el modelo de la red SBTN (Science Based Targets Network). En particular, nos centramos en los indicadores de «abundancia» de especies y de «conversión» de ecosistemas cerca de los emplazamientos operativos de nuestras minas de suministro. «Abundancia» denota la densidad de una especie concreta en un ecosistema dado, mientras que «conversión» se refiere a la alteración o desaparición de un ecosistema tras un cambio en el uso del suelo (agricultura, urbanización, etc.).

Esta planificación inicial nos permitió establecer las bases de un plan de acción informado y coherente, que nos ayudará a lanzar iniciativas para reducir los impactos negativos y preservar la naturaleza en el futuro.

Medir nuestro impacto en los recursos hídricos

En un esfuerzo constante por profundizar en nuestra comprensión de las repercusiones a las que se enfrenta la naturaleza como resultado de nuestras operaciones, también establecimos nuestra primera huella hídrica siguiendo los principios establecidos por la norma ISO 14046. Esto nos permitió identificar nuestro impacto en cuanto al consumo de agua y la contaminación como resultado directo de nuestras operaciones, así como en toda nuestra cadena de suministro.

«Debido a las diversas iniciativas emprendidas este año, tenemos una base sólida sobre la cual desarrollar nuestra estrategia de gestión del agua y de protección de la biodiversidad».

Un estudio así nos permitirá hacer realidad nuestros objetivos, debido a prácticas que reducen el impacto y a contribuciones positivas a la gestión sostenible y la protección de los recursos hídricos locales. De manera similar, también analizamos los riesgos de la calidad del agua y de la disponibilidad tanto en las zonas de producción como de suministro, haciendo especial hincapié en garantizar el derecho humano al agua potable.

Debido a las diversas iniciativas emprendidas este año, ahora tenemos una base sólida sobre la cual desarrollar nuestra estrategia de gestión del agua y de protección de la biodiversidad.