Estilo clásico, perpetuamente reinventado
Mientras que las innovaciones revolucionarias de Hans Wilsdorf se referían a las características técnicas del reloj de pulsera, también fueron fruto de una visión estética muy fuerte. La silueta de la caja, así como el diseño de la esfera del 1908 reinventan el espíritu clásico, pero muy moderno, de los relojes Oyster Perpetual originales de 1931. Los números arábigos 3, 9 y 12 se muestran en su esfera, así como el segundero pequeño en la posición de las 6 h. Al mismo tiempo, los índices de las horas facetados en oro de 18 quilates combinan armoniosamente con los distintos estilos de agujas: en forma de espada para los minutos y Breguet para las horas. El 1908 está provisto de una correa de piel de aligátor negra o marrón con forro interior verde, y presenta un cierre Dualclasp con dos láminas simétricas.